Joaquín
Costa Martínez (1846 - 1911) fue un político, jurista, economista e historiador
español, siendo el mayor representante del movimiento intelectual conocido como
regeneracionismo. Nacido en Monzón (Huesca) y fallecido en Graus
(Huesca).
Tuvo
una destacada trayectoria académica, y brilló tanto como Catedrático Universitario
como Notario, Jurista, Político, Historiador, Economista y Escritor. Igualmente
fue Diputado a Cortes por Zaragoza; Vocal de la Junta para Ampliación de
Estudios e Investigaciones Científicas; miembro de la Real Academia de Ciencias
Morales y Políticas; de la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación; de la
Real Academia de la Historia; y formó parte de la Institución Libre de
Enseñanza.
Trabajo
y estudió en Huesca, obteniendo el título de Bachiller y el de Maestro Superior.
En la Universidad Central de Madrid, se doctoró en Derecho Civil y Canónico y
en Filosofía y Letras. Fue profesor auxiliar de la Universidad Central de
Madrid, cargo al que renunció en protesta por la política educativa de la
Restauración del Alfonso XII (1857 - 1885).
A
lo largo de su vida fue letrado, historiador y escritor sobre diversos temas
referentes a la situación social de nuestro país y ejerció en diversos lugares
como: Madrid, Cuenca, Guadalajara; Huesca; Zaragoza; Jaén y otras localidades. Por
su extraordinaria capacidad de trabajo y junto con su gran dedicación a España,
me permito seleccionar algunas ideas que conforman el pensamiento económico
de Joaquín Costa Martínez (1846 - 1911), el cual resumió de esta manera:
1.
– Cambio radical en la aplicación y dirección de los recursos y energías
nacionales, volcado en educación, colonización interior, obras hidráulicas,
repoblación forestal, investigación científica y, en suma, desafricanización y
europeización de España.
2.
– Reforma de la educación en todos sus grados, rehaciendo y refundiendo a España
en el molde europeo.
3.
– Abaratamiento rápido del pan y de la carne, aumentando la productividad y
favoreciendo el crédito agrícola.
4.
– Mejoramiento de los caminos de herradura.
5.
– Suministro de tierra cultivable, con cualidad de posesión perpetua e inalienable,
a los que la trabajan y no son de su propiedad, derogando las leyes
desamortizadoras relativas a los concejos, autorizando a los Ayuntamientos para
adquirir nuevas tierras, creando huertos comunales. Donde esto no baste,
expropiación y arrendamiento.
6.
– Legislación social, incluyendo contrato de trabajo, seguro social, cajas de
retiro y otras atenciones a los trabajadores.
7.
– Sanear y europeizar nuestra moneda, mediante la europeización de la
agricultura, minería, comercio, educación nacional, administración pública y
política, que reponga la confianza de Europa en nosotros.
8.
– Creación de un poder judicial digno de su función.
9.
– Autogobierno local: municipalización de servicios públicos y de ciertas
industrias o comercios, incluyendo tranvías, teléfonos, alumbrado, baños,
lavaderos, fuerza motriz, tahonas, carnicerías, hielo, etc.
10.
– Renovación del liberalismo abstracto y legalista imperante, que solamente ha logrado
crear y garantizar las libertades públicas en el instrumento ilusorio de la
Gaceta, actualmente llamado Boletín Oficial del Estado; sustituyéndolo por un
neoliberalismo orgánico, ético y sustantivo, que atienda a crear alianzas de
dichas libertades, con actos personales de los gobernantes, principalmente,
dirigidos a reprimir con mano de hierro y sin tregua a caciques y oligarcas.
Este
pensamiento económico de Joaquín Costa Martínez es propio de una época en la
que España no tenia una clara estabilidad política, era un país sin recursos, y
su base económica se fundamentaba en decisiones de caciques y agricultura de
pequeño tamaño. Los diez anteriores puntos eran normas y consejos a los que el
Estado español no se dedicó expresamente a ello.
El
brillante Joaquín Costa Martínez apenas fue seguido por unos pocos españoles.
Vicente
Llopis Pastor
16
de junio de 2025
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