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MACROECONOMÍA

Tal como escribí ayer, existen diferentes paradigmas de conocimientos en la Economía, y un consenso de que “la Ciencia Económica estudia las necesidades humanas por medio de recursos escasos susceptibles de usos alternativos”. También hablé de la separación entre Macroeconomía y Microeconomía, como una gran división metodológica y no cuantitativa. De acuerdo con ello, hoy voy a hablar de Macroeconomía.

La Macroeconomía es la parte de la Economía que se encarga de analizar y estudiar el funcionamiento económico de manera global y general, estudiando las variables que se producen en el monto total de bienes y servicios, ganancias, grado de empleo y nivel de precios, entre otros aspectos importantes. Está enfocada en los grandes aspectos de la Economía, dejando de lado los agentes económicos que sirven para determinar los objetivos económicos de una nación y su política económica. Al igual que hice ayer, me voy a permitir hablar de las principales características de la Macroeconomía, que son las siguientes: a) Estudia el funcionamiento de la Economía a nivel global y general; b) Explica la relación entre las distintas variables de la Economía; c) Su objetivo es prevenir posibles crisis, mediante el estudio de las variables de la Economía; y d) No busca estudiar el comportamiento de cada mercado individual sino que los estudia en conjunto.

En este caso, las variables de la Macroeconomía son: 1) Estudiar el Producto Interior Bruto (PIB), que es el valor total de la producción de un país durante un periodo determinado de tiempo, normalmente un año; 2) Estudiar la inflación, que consiste en una subida general de precios, que en los países de la Organización de Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) se mide anualmente mediante el Índice de Precios al Consumo (IPC), correspondientes a la sostenibilidad de los precios de bienes y servicios; 3) Tasa de desempleo, que es el número de personas sin empleo en un determinado territorio, que se miden por la tasa de actividad, que son las personas que se sitúan entre los 16 a los 67 años, deduciendo quienes están estudiando y depurando a las personas que les es imposible trabajar; 4) Balanza de pagos, junto con la balanza comercial, mide las transacciones entre diversos países, teniendo en cuenta los ingresos y egresos de la Economía; 5) Tasa de interés de mercado, es decir, el porcentaje de dinero que cobra un banco, o entidad financiera, al ofrecer créditos; 6) Gasto público, que es el dinero que gasta el Estado en inversiones, funcionarios y otros conceptos que, obligatoriamente, figuran en la Constitución de cada país; y 7) Tasa de cambio, que es el valor de la moneda extranjera en relación con la moneda local.

En definitiva, los principales objetivos de la Macroeconomía son: fomentar el crecimiento del PIB de un país; reducir la tasa de desempleo; aumentar la producción para generar nuevos puestos de trabajo; lograr la estabilidad en el nivel de precios (IPC); evitar el déficit fiscal, es decir, que el Estado gaste más de los recursos que le ingresan; administrar el tipo de cambio, es decir, el valor de la moneda extranjera en moneda nacional; y regular la balanza comercial, que es una parte de la balanza de pagos.

La importancia de la Macroeconomía radica en el papel fundamental que tiene en el desarrollo de un país, ya que las variables que analiza y los objetivos que persigue son imprescindibles para el correcto funcionamiento de la Economía. Sin un estudio adecuado de la Macroeconomía, una Economía podría volverse inestable, sufriendo un aumento del desempleo, elevada inflación y déficit fiscal, resultando así en una posible crisis económica. Las diferencias entre Macroeconomía y Microeconomía son las de que la Macroeconomía es la encargada de estudiar el comportamiento económico en general, ésta no se centra en conceptos individuales de menor escala, es decir, que se encarga del estudio económico entero de una nación; mientras que la Microeconomía estudia el comportamiento económico a menor escala, por ejemplo en los hogares o empresas en un determinado mercado. Tal como dije ayer, la diferenciación entre macro, que quiere decir grande, y micro, que significa pequeña, no es por el volumen de las magnitudes económicas, sino que es consecuencia de la metodología que se emplee, y ponía el ejemplo de la empresa estadounidense General Motors, estudiada en Microeconomía, frente al Estado de Luxemburgo, que se estudia en Macroeconomía, a pesar de que el volumen de dicho país es el 70% del de General Motors.

Algunos ejemplos de Macroeconomía podrían ser: ante una crisis económica, un país decide devaluar su tipo de cambio con el objetivo de atraer inversiones del exterior; un país con déficit económico decide realizar un ajuste para reducir su gasto público; ante una inminente inflación, el estudio macroeconómico de un país decide fomentar el comercio exterior, para que haya una mejor competencia de precios; un país desea calcular su PIB para así conocer cuál fue su producción de bienes o servicios, y con base a ello, tomar decisiones.

No me resisto a citar, superficialmente, el modelo keynesiano, debido al brillante economista británico John Maynard Keynes (1883-1946), que nos presenta un esquema lineal que, aproximadamente, se describe de esta forma: La oferta monetaria es la cantidad de dinero que el banco emisor pone a disposición del público; el público tiene su demanda monetaria, agudizada en periodos, como pueden ser navidades, fiestas, vacaciones, etcétera. La conjunción de oferta y demanda monetaria tiene su equilibrio en el precio del dinero, que se llama interés; el interés ha de ser igual al ahorro y, en el caso de que no haya un equilibrio, hay que recurrir al ahorro de inversores de otro país. El ahorro es una parte de la renta disponible de las economías domésticas, según los casos, puede situarse en un margen entre el diez y el veinticinco por ciento, y sale de los salarios y rendimientos de las personas y de las empresas; con ello la renta nacional disponible aumenta o disminuye y, consecuentemente, fija los salarios nominales para los trabajadores, que luego se dividen por la variación del IPC y se llega a los salarios reales. Lo que he expuesto de keynesianismo es un ejemplo de cómo funciona la Macroeconomía.

Estimado lector, dejo a su criterio cómo se han de estudiar las consecuencias que está teniendo la subida del precio de la electricidad en España. Para sacar consecuencias hay que verlo desde el punto de vista del consumidor y el oferente pero, fundamentalmente, las consecuencias de la Macroeconomía en España parece que se sitúan hacia una reducción del nivel de empleo, alternativas de energía sostenible, ahorro, tasas de interés, IPC, PIB y otras cuestiones. Tanto la Macroeconomía como la Microeconomía son necesarias para una perfecta estabilidad económica y social en nuestro país.

Un afectuoso saludo.

               

 

Vicente Llopis Pastor

27 de noviembre de 2021

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