El
“socialismo anarquista” es una variante de “socialismo sin Estado”. Consiste en
una forma de anarquismo que se identifica como parte de la izquierda política.
Se suele referir a él con distintas expresiones, tales como anarquismo
socialista, anarcosindicalismo, anarquismo de izquierda, anarquismo
comunitario, anarquismo social, socialismo anarquista, socialismo libertario o
libertarismo de izquierda.
Su
significado más importante existe en contraste con el anarquismo de propiedad
privada. Es un término utilizado por varios teóricos políticos para diferenciar
dos grandes categorías, dentro del anarquismo, siendo éste el colectivista y
siendo el otro el anarquismo individualista. A diferencia del anarquismo
individualista, que propugna la importancia de la propiedad privada, el
anarquismo socialista rechaza la propiedad privada, que considera una fuente de
desigualdad social, y postula una sociedad futura en la que la propiedad
privada no existe y se sustituye por la reciprocidad y una sociedad
igualitarista. El anarquismo social incluye el anarcocolectivismo,
anarcocomunismo, anarcosindicalismo, ecología social y economía participativa.
Tantas
expresiones y nombres que se le conoce al socialismo anarquista es un enfoque multifacético,
en el que el colectivo social se difumina. Todas estas denominaciones consisten
en combinar “socialismo” con “anarquismo”. Todas ellas señalan que la libertad
debe conjugarse con la igualdad económica, aunque bajo distintos enfoques, de
acuerdo a la corriente como un paradigma que varía por distintos tiempos y
lugares. El anarquismo de izquierda se distingue claramente del anarquismo
capitalista o del “anarquismo de derecha”, que más bien es indiferente hacia
la desigualdad o incluso la reivindica. Esta división, separada claramente por
su filosofía y economía de la propiedad privada y el mercado, independiente del
peso histórico de cada una en el pasado, es considerada la más importante de
las ideas anarquistas.
Recuérdese
que el anarquismo es la teoría social que propugna la abolición del Estado,
cualquier forma estatal es considerada como nociva y restrictiva de la libertad
de los seres humanos. El anarquismo pude considerarse como una posición extrema
del liberalismo en el que el Estado no debe ni ejercer la misión de vigilante,
intentando eliminar cualquier coacción proveniente del Estado.
En
la diversidad de formulas que sirven para definir el “socialismo anarquista” se
busca la desaparición del Estado, pero esto resulta muy difícil e
insolucionable. Piénsese en lo que seria una España de 48 millones de
habitantes, en el que se necesitan mas de 4 millones de personas para
gobernarlas. La desaparición del Estado sería una trágica situación en la que
la lucha entre los ciudadanos seria agresiva y violenta y destrozaría todos los
tipos de civilización que hemos alcanzado desde los albores de la humanidad
hasta nuestros días.
Vicente
Llopis Pastor
22
de abril de 2025
Muy interesante reflexión D. Vicente
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