José
María Albaigés Olivart nació en Juneda, Las Garrigas, provincia de Lérida, el 8
de octubre de 1940 y falleció en Barcelona el 18 de marzo de 2014. Fue un
ingeniero de caminos, economista, lexicógrafo y escritor en español y en catalán.
Estudió la carrera de Ingeniero de Caminos que
acabó en 1965, posteriormente estudió la licenciatura en Ciencias Económicas y
Empresariales licenciándose en 1976. Fue una persona superdotada y dio muestra
de ello en múltiples de las actividades que realizó. Fue un polímata y
apasionado de múltiples materias, principalmente matemáticas recreativas;
ludolingüística; patafísica, que es un movimiento cultural francés de la
segunda mitad del siglo XX vinculado al surrealismo, que él rebautizó con el
nombre “ciencia inútil”; onomástica; genealogía; numerología; eulogología; historia;
mnemotecnia y literatura de viajes, solo por citar algunos de los asuntos a los
que dedicó decenas de libros.
Trabajó
en el sector de la construcción e inmobiliario en empresas como COMYLSA, APCE y
Reinhold Ulloa, señalándose en el diseño y construcción de obras hidráulicas,
aparcamientos, autopistas y edificios de gran altura. Como ingeniero de caminos
diseñó y publicó el primer “Mapa geotécnico de Barcelona” y como matemático
recreativo publicó compilaciones de problemas como “¿Se atreve Vd, con ellos?”
o monografías divulgativas como “El número pi”, entre otras.
Publicó
dos novelas históricas, “Alcibíades, el primer griego” y “Sila, el último
republicano”, y dejó otras dos inéditas. Dentro de la lexicografía destacó con
un “Diccionario de palabras afines” y diversos libros sobre onomástica, que es
la disciplina en la cual fue considerado uno de los mayores expertos en España;
se citan entre sus mejores obras en este campo el “Diccionario de nombres de
persona”, “El gran libro de los apellidos”, la monumental “Enciclopedia de los
nombres propios” y una “Enciclopedia de los topónimos españoles”, entre otros,
indistintamente en catalán o español.
Fue
también un asiduo colaborador de la prensa con artículos publicados en “La
Vanguardia”, “Expansión”, “Muy Interesante”, “Cacumen”, “Quo”, “Histoire”, “Noticias
de la Construcción”, etcétera. También fundó “Carrollia”, una revista dedicada
a las matemáticas recreativas y la lingüística, además del BOFCI (Boletín de la
Facultad de Ciencias Inútiles). Editó durante un tiempo “Semagames”, revista de
palíndromos y eulogología y presidió la Sociedad de Onomástica, la Asociación
de Onomástica, Heráldica y Genealogía (AOHG) y el FONI (Fórum Onomástico
Nacional e Internacional). También presidió el Club Palindromista Internacional
(CPI). Fue miembro del Comité de Política Económica de la Cámara de Comercio de
Barcelona y de otros diversos comités, asociaciones y grupos de interés
cultural; en 2011 fue declarado hijo predilecto de Juneda, en donde había
nacido. Fue miembro de Mensa España, asociación que recluta a personas de
elevado coeficiente intelectual, de la cual fue su segundo presidente entre
1988 y 1993.
A pesar
de haberse licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales no se dedicó a
temas económicos y destacó por los juegos de palabras y artilugios matemáticos,
así como entretenimientos en los que hay que agudizar la mente.
Entre
sus numerosas obras tenemos algunas como: “Diccionario de nombres de personas”
(1984); “Diccionari de noms de persona i llur significat” (1980); “Els carrers
de Juneda” (1991); “Noms y renoms de l'antroponímia junedenca” (1992); “Diccionari
dels noms de noi” (2000); “Diccionari dels noms de noia” (2000); “Diccionari
dels noms de persona” (2000); “El Llibre dels Noms de Nen” (2001); y muchos
otros en los que algunos los publicó en español aunque la mayoría fueron en
catalán, sobre todo tras la creación de la Comunidad Autónoma de Cataluña a
partir de la cual comienza a perseguirse el idioma español en dicha Comunidad.
El
periodista Francisco Marhuenda García (1961), director del periódico “La Razón”
califica a José María Albaigés Olivart como un catalanista emboscado que
pretendía diseñar a Cataluña con las ideas básicas que tiene el País Vasco y
llegar a convenios como los que ahora parece ser que se han realizado entre
Esquerra Republicana de Catalunya y el Partido Socialista de Cataluña. Este
periodista lo considera como un lobo catalán con piel de cordero. A mí me
parece un experto en juegos de mesa y deslumbrante en sus reuniones de amigos y
otras personas.
Intentó
llegar a ser uno de los más destacados polímatas de la Historia, pero no llegó
a la altura de otras personalidades como fueron Confucio (551 a.C.-479 a.C.),
filósofo chino; León Battista Alberti (1404-1472), italiano, arquitecto y
secretario personal de los papas italianos Eugenio IV (1383-1447), el italiano
Nicolás V (1397-1455) y el italiano Pio II (1405-1464); Leonardo da Vinci
(1452-1519), florentino, pintor, anatomista, palentólogo, arquitecto, botánico,
escritor, escultor, filósofo, ingeniero, inventor, músico, urbanista, poeta,
gastrónomo y otros temas. Da Vinci es el verdadero genio universal aceptado por
los historiadores. Giovanni Pico de la Mirandola (1463-1494), filósofo,
teólogo, quien murió muy pronto y que poseía una memoria extraordinaria,
pudiendo repetir cualquier cosa que le dijeran, incluyendo miles de palabras
que era capaz de reproducir; Lucio Anneo Lucano (39-65), poeta romano de origen
hispano, igualmente de extraordinaria memoria y Marcelino Menéndez Pelayo
(1856-1912), catedrático de Literatura de la Universidad Central de Madrid a la
edad de 22 años, que entonces se consideraba menor de edad, pues la mayoría de
edad era a los 23 años y el Congreso de Diputados español le concedió la
mayoría de edad a los 21 años, para así evitar que un menor de edad fuera
catedrático universitario. Fue el gran polímata español y además el gran
polígrafo, ya que escribió numerosísimos libros, por ejemplo, a los 19 años
publicó “Historia de los heterodoxos españoles”, que consta de doce tomos en
los que refleja las personas que no han seguido una línea habitual en artes,
ciencias, letras y otros menesteres.
Volviendo
a José María Albaigés Olivart, a mí me parece que fue una “rara avis” cuyo
significado es el de una persona difícil de catalogar.
Aunque
no se aplicó fundamentalmente a la Economía sí que hay que reconocerle como un
personaje que tuvo múltiples facetas y una enorme capacidad intelectual.
Vicente
Llopis Pastor
12 de septiembre de 2024
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