Mateo López Bravo, cuyo año de nacimiento es desconocido, falleció en
Madrid en el año 1627, y fue un magistrado, jurisconsulto y arbitrista español,
escritor sobre materias económicas. Lo incluimos en esta selección de
economistas españoles porque se dedicó fundamentalmente a divulgar lo que hoy
llamamos Ciencia Económica. Según el vocabulario de su época fue un arbitrista,
que es el equivalente a la profesión de economista actual.
Se conoce muy poco la
trayectoria académica, profesional, investigadora y docente del Sr. López Bravo
y la información que poseemos de él es relativa a su papel de gobernante,
pensador económico, sociólogo y formado en el llamado “tacitismo”, corriente
europea de pensamiento político y diplomático inspirada en las obras del
historiador romano Tácito (55-120).
Entre los diversos
cargos oficiales que tuvo se encuentran el de Gobernador de Sierra de Gata,
localidad perteneciente a la provincia de Cáceres, situada al noroeste de ésta
y lindando con Portugal, entre 1623 y 1627. Fue Alcalde de Casa y Corte y Juez
de Obras y Bosques. Como pensador económico y social se formó en el tacitismo,
que he citado anteriormente. Según él, la prosperidad económica sólo podría
lograrse fomentando el trabajo, para lo cual era esencial castigar la
mendicidad y favorecer la natalidad y el crecimiento demográfico. En 1616
publicó los dos volúmenes de “De rege et regendi ratione, libri duo”, traducida
al español como “Del rey y de la razón de gobernar, dos libros”, dedicado a Pedro
Fernández de Castro y Andrade, Conde de Lemos (1575-1637), donde atacaba a
fondo el sistema económico-social de la España de su tiempo. Y en 1627 añadió
un tercer volumen titulado “De regendi ratione, sive de rerum copia, liber
tertius”, traducido al español como “Del arte de gobernar, o sobre la
abundancia de los bienes, libro tercero”.
Aunque tuvo relación con
la Escuela de Salamanca, el momento más estudioso de los españoles en la
Ciencia Económica, y que crearon la Teoría cuantitativa del dinero y los
planteamientos de la inflación, Mateo López Bravo estuvo más dedicado a lo que
se llama “Economía Política”, que es la expresión que hasta hace poco se ha
empleado en nuestro país para analizar y desarrollar el gobierno y la sociedad
española. Realmente, el señor López Bravo fue un político, con algunas ideas
socialistas imperantes en el siglo XVII que sirvieron para que algunos
tratadistas extranjeros acudieran a sus libros para mayor ilustración.
Fue un escritor
moralista y político, destacando su socialismo, cuya preocupación principal fue
la prevención de la explotación laboral que prometía la entrada del capitalismo
en España. Cierta confusión descansa sobre los datos cronológicos que se poseen
sobre este político, pero se tiene la certeza de que fue Gobernador y Alcalde,
tal como he expuesto al principio.
Fue uno de los primeros
tratadistas que incluyó el trabajo como el más importante factor de la
producción, lo cual le permitió conocer la precariedad económica que en muchos
casos tenían los productores y trabajadores del campo. Anteriormente a él, los
temas económicos se basaban en la naturaleza y el capital, y menos importante,
el trabajo. Precisamente, López Bravo incluyó el trabajo como el más destacado
medio de la producción de bienes y servicios, y ello le hizo estudiar y
describir la demografía española y las bases jurídicas y económicas para
desarrollar las actividades productivas de las personas.
Escribió varias obras,
fundamentalmente para el buen gobierno y la mejor economía posible para nuestro
país, en las que destaco algunos títulos que ya he citado, por ejemplo: “De
rege et regendi rationi libri duo”; “De regendi ratione, sive de rerum copia,
liber tertius”. Como ha ocurrido en otras ocasiones, fue más conocido en el
extranjero que en España. El hispanista francés Henry Méchoulant realizó un
comentario favorable a su obra “De regendi rationi, sire de rerum copia, liber
tertius”, que fue traducido por Antonio Pérez Rodríguez en su obra “Mateo López
Bravo: Un socialista español del siglo XVII”, publicado en el año 1977.
Aunque sus obras no
solamente fueron sobre economía, ya que fue magistrado, jurisconsulto y, en
algunas ocasiones, arbitrista español, demostró la capacidad de los
intelectuales que nuestro país tenían para exponer y solucionar los grandes
temas económicos de la Monarquía Hispana en unos momentos en los que el oro y
la plata que venían de las Indias dieron lugar a la llamada “revolución de los
precios”, con la que finalmente obtuvieron más beneficio los países europeos
que la propia España, que estaba continuamente en guerra y luchas con países de
nuestro continente, y en los mares y océanos, contra la piratería y los
corsarios de todo el mundo.
A Mateo López Bravo hay
que considerarlo como un arbitrista español del siglo XVII que aportó importantes
escritos, obras, libros e investigaciones sobre la trascendencia de las
materias económicas.
Vicente
Llopis Pastor
26 de abril
de 2023
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