En el año 1974 el Gobierno español autoriza la libre expansión de las entidades bancarias; al año siguiente también la libre expansión de las Cajas de Ahorros. Fue el comienzo de la apertura de numerosas oficinas por todo el país, hasta tal extremo que en algunas ocasiones jocosamente se decía que el bar que había en la esquina se había transformado en una oficina bancaria. Posteriormente, con el primer Gobierno del PSOE, ganador de las elecciones del 30 de octubre de 1982, se reforma la propiedad, Consejo de Administración y ejecutivos de las Cajas de Ahorros, que pasan a ser personas afiliadas al partido político ganador de las elecciones. Esta explosión del número de oficinas y de nuevos ejecutivos y responsables de finanzas fijados por la política, ha traído graves problemas al sistema financiero español; sobre todo a partir del año 2008, con la caída de Lehmann Brothers y el inicio de una crisis financiera que todavía no está del todo solucionada.
Amable
lector, usted recordará que han desaparecido la mayoría de las Cajas de
Ahorros, muchas de ellas absorbidas por un Banco; ha habido fusiones e
integraciones entre entidades bancarias; se implantó el Sistema Integrado de
Protección (SIP), que consiste en que algunas Cajas de Ahorros se ayuden o
apoyen para poder sostenerse; creación del Fondo de Reestructuración Ordenada
Bancaria (FROB), con aportaciones multimillonarias del Gobierno español e,
incluso, pidiendo ayudas a la Unión Europea. En el caso de Alicante desapareció
la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM) que en principio iba a integrarse en
el Banco Base, hoy Liberbank, pero que no la admitieron las Cajas de Ahorros
que la acompañaban porque su situación financiera no era muy buena. Entonces el
Gobierno estableció una subasta adjudicándola en condiciones inmejorables al
Banco de Sabadell. Casos como éste ocurrieron en toda España y, por citar los
más significativos en cuanto a Cajas de Ahorros, detallo Caixabank, un potente
banco fruto de la fusión de todas las Cajas de Ahorros catalanas al frente de
la cual estaba la Caja de Pensiones para la Vejez y Ahorros de Cataluña y
Baleares; y también, Bankia, resultado de la fusión de la Caja de Ahorros y
Monte de Piedad de Madrid, Caja de Ahorros y Monte de Piedad de Valencia y
algunas otras menores. Lo cierto es que, hoy en día, existen alrededor de
cincuenta entidades bancarias frente a las más de doscientas que hubo hace
veinte años, sin contar las Cajas Rurales que, en número pequeño, todavía se
mantienen.
Pero
no es mi intención hablar del proceso que ha llevado a cabo el sistema
financiero español desde que se permitió la liberalización de la expansión
bancaria y de Cajas de Ahorros y la crisis financiera de 2008. Mi interés es
hablar por uno de los banqueros que ha tenido, y sigue teniendo, una importante
relevancia en España. Se trata de José Ignacio Goirigolzarri Tellaeche (1954).
José
Ignacio Goirigolzarri Tellaeche nació en Bilbao en 1954, Licenciado en Ciencias
Económicas y Empresariales por la Universidad de Deusto en Bilbao y en
Planificaciones Estratégicas por la Universidad de Leeds en el Reino Unido.
Durante los años 1977 a 1979 fue Profesor de Planificación Estratégica en la
Universidad Comercial de Deusto. Ingresó en el Banco de Bilbao en 1977, en el
área de Planificación Estratégica, y comenzó una fulgurante carrera. En 1992
fue nombrado Director General del Banco Bilbao Vizcaya (BBV) y en 1994 se
incorporó al Comité de Dirección de la entidad. Fue responsable de Banca
comercial en España y de las operaciones en Hispanoamérica. En abril de 2001
fue nombrado Director General del Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA),
responsable de Banca minorista. En diciembre de 2001 fue designado Consejero
Delegado del BBVA, puesto en el que permaneció hasta octubre de 2009. En este
periodo de tiempo tuvo otros cargos como el de Presidente de Bancomer (México);
Citic Bank (China) y de CIFH (Hong Kong). Abandonó la entidad acogiéndose a una
jubilación anticipada a los 55 años de edad con una pensión anual de tres
millones de euros. Igualmente ha sido Consejero o miembro de algunas compañías
o asociaciones, por ejemplo Vicepresidente de Telefónica; Vicepresidente de
Repsol; Presidente de la Fundación España-USA, de la que hoy es Presidente de
Honor; Consejero de la Asociación para el Progreso de la Dirección; Patrono de
Everis; de Orkestra; miembro de la Confederación Española de Directivos y
Ejecutivos (CEDE); Vicepresidente de Deusto Business School; impulsor de Garum
Fundatio; Presidente del Consejo del Instituto Americano de Investigación
Benjamin Franklin, etcétera.
El 9
de mayo de 2012 sustituye a Rodrigo Rato como Presidente de Bankia, y es
elegido por los Consejos de Administración de todas las entidades que crearon
Bankia. Es el ejecutivo de mayor ERE en la historia de España. La entidad cerró
durante su presidencia en Bankia más de mil oficinas, dejando por el camino a
unos siete mil empleados. Bajo su dirección Bankia recuperó la solvencia y
volvió a generar beneficios, destacando su iniciativa en la devolución de las
cláusulas suelo y en su empeño por devolver lo antes posible las ayudas
recibidas por Bankia del Estado español, que a su vez lo consiguió de la Unión
Europea (UE), y que su valor actual según la cotización bursátil podría ser de
unos cuarenta mil millones de euros. El señor Ignacio Goirigolzarri no lo
consiguió, entre otras razones porque las acciones tuvieron una baja cotización
y, si las vendía, no podía recuperar los cuarenta mil millones de euros que he
citado.
Ante
estas situaciones, parece ser que el Gobierno español vio con buenos ojos el
que un experimentado banquero, especialista en Planificación Estratégica;
conocedor de entidades bancarias internacionales y una sabiduría sin límites,
pudiera llevar Bankia a mejor puerto. Lo cierto es que los años han ido pasando y Bankia ha tenido
que capear todo lo que le ha ido ocurriendo al sistema financiero español. He
de decir que el Gobierno español, como el de cualquier otro país, ha de tener
mucha mano izquierda y diligencia para que las finanzas del país no se
deterioren y creo que el Sr. Goirigolzarri entendió que era idóneo para la
singladura en el proceloso océano financiero de Bankia. Pero nada es eterno, y
los años van pasando; hace aproximadamente tres años se habló de una posible
fusión entre Caixabank con Bankia y, hete aquí, que ya es una realidad desde
abril de 2021.
Esta
nueva entidad, vamos a llamarla Kaixabank-Bankia, tiene una enorme dimensión.
Es el primer Banco por Activos Totales Medios (ATM) de España, superiores a los
seiscientos mil millones de euros, de los cuales doscientos mil millones proceden
de Bankia y cuatrocientos mil millones proceden de Kaixabank. Si no estoy
equivocado, según mis cálculos, los ATM de los grandes bancos son: BBVA,
cuatrocientos mil millones de euros y Santander, trescientos sesenta mil
millones de euros, con lo cual, este nuevo Banco pasa a ser el número uno de
España. El número de empleados supera los cincuenta mil, de los cuales
dieciocho mil proceden de Bankia y treinta mil de Kaixabank. En clientes,
Bankia aporta 7,4 millones y Kaixabank 13,6 millones. Su cotización bursátil
sitúa a Bankia a 1,75 por acción y en Kaixabank a 2,50 por acción. En fin, hay
muchos más datos que quizás no vengan al caso pero me permito resumir el que la
nueva entidad, en su setenta por ciento, es participada por Kaixabank y el
treinta por ciento porBankia, por cierto, que en las acciones de Bankia es
mayoritario el FROB y, por tanto, el propietario es el Estado español.
Hace
unos días se dio a conocer la nueva entidad que vamos a llamar
Kaixabank-Bankia, cuyo Presidente va a ser José Ignacio Goirigolzarri
Tellaeche, mientras que ninguno de los ejecutivos procedentes de Bankia va a
tener poder en la nueva entidad. Ya se ha avanzado que van a cerrar más de mil
oficinas y despedir a ocho mil trescientos empleados. Así lo entienden porque
hay un exceso de estructura en la bancarización española y porque la idea es la
de que vamos a la Banca digital, con lo cual es el propio cliente quien opera
en sus cuentas desde su casa o fuera de la oficina; en tal caso, dicen que no
hay razón para que las oficinas tengan muchos empleados. Como cosa curiosa, es
la de que el nuevo Presidente, el Sr. Goirigolzarri, se ha puesto un salario
anual de creo que 1,65 millones de euros, amén de lo que es corriente en las
entidades bancarias de cobrar “bonus” por lograr objetivos. Mientras tanto, el
Gobierno ha dictaminado, y creo que lo va a presentar como Ley, la limitación
del salario de los directivos de los Bancos, porque consideran que es exagerada
por lo que hacen y supone una enorme diferencia respecto al salario de un
trabajador bancario, incluso de aceptable nivel. Veremos lo que ocurre, porque
en el mes de mayo, cuando se reúna el Consejo de Administración o, tal vez, la
Junta General de Accionistas, en la que el Gobierno español, por poseer
acciones financiadas con el FROB, veremos si acepta tan suculento salario, que
va en contra de sus principios. Recuérdese que desde el año 2009, el Sr.
Goirigolzarri está cobrando tres millones de euros anuales por sus años de
trabajo en el BBVA, que fueron exactamente treintaidós y a los que habrá que
añadir la propuesta actual, en el caso de que se apruebe.
Y así
están las cosas, amigo lector, la Banca es importante y más todavía en España
por la bancarización que hay de todos los servicios. En los últimos años han
ido cayendo Bancos y Cajas de Ahorros, algunos han engordado y otros han
enflaquecido. Pero no me cabe la menor duda de que gracias a su inteligencia,
lógica aristotélica y planificación estratégica, me atrevería a decir que José
Ignacio Goirigolzarri Tellaeche es “Un
banquero afortunado”.
Hasta
un próximo artículo, estimado lector.
Vicente Llopis Pastor
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